Puede sonar raro este título de entrada, de hecho lo es, pero la verdad es que cada vez adelantamos -y con adelantamos me refiero a los comercios- más las fiestas y como la más cercana es Navidad pues os planteo esta cuestión que se ha convertido en muy común en los últimos años: ¿Es la Navidad una tradición religiosa o simplemente la época más consumista del año?
En Navidad, los hogares que pueden permitírsela, se gastan entre 300€ y 500€ entre regalos comida y lotería (62€ por habitante en 2015). Esto no se parece en nada a lo que hace 70 años sucedía. La diferencia radica sobre todo en la finalidad de la fiesta propiamente dicha: conmemorar y celebrar el nacimiento de Jesucristo, pero esto con los avances tecnológicos de los últimos años y el aumento del capitalismo se ha convertido en un tiempo de derroche. Pero esto como siempre, no solo es culpa nuestra, de los consumidores. Es más bien de los comercios. En estas señaladas fiestas las calles se iluminan, las tiendas con sus atractivos adornos nos llaman a comprar o los anuncios en la televisión nos seducen todavía más. A esto hay que añadirle que está mal visto no regalar nada ni celebrar ninguna fiesta o cena familiar.
Tras esta parte feliz, familiar y de fiesta que es con lo que asociamos generalmente esta época del año, se esconde lo que es la Navidad para la gente sin recursos y sin un techo sobre el que dormir. Para los pobres esta época es muy triste o simplemente no tienen Navidad. Su condición de vida no les permite siquiera hacer una modesta cena navideña, mucho menos comprar ropa, juguetes o adornos. Esto le sucede según la OMS a más de mil millones de personas en el mundo.
Así que no debemos olvidarnos de lo que realmente significa la Navidad y a la hora de consumir, dar gracias por la suerte que tenemos de poder hacerlo, ¡¡FELIZ NAVIDAD!!
Fdo: PABLO, Maristas Ourense
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